La novela moderna es una composición más extensa, escrita en prosa, cuyos hechos de ficción se construyen con el objetivo de distraer al lector que se deleita con la trama que se narra. En este tipo de novela nacen la picaresca y se erige la figura del Quijote:
- NOVELAS PICARESCAS: son narraciones que tienen por protagonistas a personajes normales y vulgares que quieren cambiar su destino, marcado por un origen humilde, y mejorar en la escala social. El Lazarillo de Tormes, publicada anónimamente en siglo XVI, es el máximo exponente de estas novelas en nuestro país:
En este tiempo vino a posar al mesón un ciego, el cual, pareciéndole que yo sería para adestralle, me pidió a mi madre, y ella me encomendó a él, diciéndole cómo era hijo de un buen hombre, el cual, por ensalzar la fe, había muerto en la de los Gelves, y que ella confiaba en Dios no saldría peor hombre que mi padre, y que le rogaba me tratase bien y mirase por mí, pues era huérfano. ÿl respondió que así lo haría y que me recibía, no por mozo, sino por hijo. Y así le comencé a servir y adestrar a mi nuevo y viejo amo. Como estuvimos en Salamanca algunos días, pareciéndole a mi amo que no era la ganancia a su contento, determinó irse de allí; y cuando nos hubimos de partir, yo fui a ver a mi madre, y, ambos llorando, me dio su bendición y dijo:
-Hijo, ya sé que no te veré más. Procura de ser bueno, y Dios te guíe. Criado te he y con buen amo te he puesto; válete por ti.
Y así me fui para mi amo, que esperándome estaba.
Salimos de Salamanca, y, llegando a la puente, está a la entrada de ella un animal de piedra, que casi tiene forma de toro, y el ciego mandóme que llegase cerca del animal, y, allí puesto, me dijo:
-Lázaro, llega el oído a este toro y oirás gran ruido dentro de él.
Lazarillo de Tormes, (Anónimo)
- DON QUIJOTE DE LA MANCHA. Gran crítica de Miguel de Cervantes a las novelas de caballerías publicadas previamente. En ella, Don Quijote encarna el sentido de la crítica con sus excentricidades y su fiel escudero Sancho Panza.
En esto, descubrieron treinta o cuarenta molinos de viento que hay en aquel campo; y, así como don Quijote los vio, dijo a su escudero: - La ventura va guiando nuestras cosas mejor de lo que acertáramos a desear, porque ves allí, amigo Sancho Panza, donde se descubren treinta, o pocos más, desaforados gigantes, con quien pienso hacer batalla y quitarles a todos las vidas, con cuyos despojos comenzaremos a enriquecer; que ésta es buena guerra, y es gran servicio de Dios quitar tan mala simiente de sobre la faz de la tierra.
- ¿Qué gigantes? -dijo Sancho Panza.
- Aquellos que allí ves ?respondió su amo? de los brazos largos, que los suelen tener algunos de casi dos leguas.
-Mire vuestra merced- respondió Sancho- que aquellos que allí se parecen no son gigantes, sino molinos de viento, y lo que en ellos parecen brazos son las aspas, que, volteadas del viento, hacen andar la piedra del molino.
Don Quijote de La Mancha, Miguel de Cervantes